Es asombroso como muchas personas, por lo demás inteligentes, se niegan a considerar la evidencia, o incluso la posibilidad de que, en realidad, no haya ningun conflicto político o filosófico fundamental entre los grandes poderes de Oriente y Occidente.
Rusia, al igual que Estados Unidos, está totalmente endeudada con los globalistas financieros, a través de organizaciones como el Fondo Monetario Internacional y el Banco de Pagos Internacionales.
Sede del Banco de Pagos Internacionales, en Basilea, Suiza
El asesor económico global de Rusia en asuntos que van desde la inversión en imagen hasta las privatizaciones, no es otro que Goldman Sachs.
Goldman Sachs también ha trabajado en estrecha colaboración con el gobierno de Ucrania desde 2011 y comenzó su labor de asesoramiento con Ucrania de forma gratuita. (Siempre que Goldman Sachs hace algo de forma gratuita, debemos sospechar algo).
Las élites bancarias han estado trabajando a ambos lados de la valla durante esta gran farsa que es el enfrentamiento entre Rusia y Ucrania.
Rusia ha seguido pidiendo préstamos por miles de millones de dólares a bancos occidentales, entre ellos Deutsche Bank y Credit Suisse, año tras año, lo que demuestra que no se oponen en lo más mínimo a trabajar codo a codo con los “malignos ladrones occidentales”.
El presidente ruso Vladimir Putin se reúne con el mismísimo “Señor Nuevoordenmundial” en persona, Henry Kissinger, de manera regular; y de acuerdo con el secretario de prensa de Putin, son ” viejos amigos “. Las reuniones regulares de Putin con Kissinger empezaron casi inmediatamente después de que Putin alcanzara el poder en el año 2000.
La relación de Putin con Kissinger ha sido tan pronunciada, que el Ministerio de Relaciones Exteriores ruso otorgó a Kissinger un doctorado honoris causa en diplomacia.
Incluso Putin colocó a Kissinger a la cabeza de un “grupo de trabajo ” bilateral de política exterior, junto con el ex jefe de la KGB y globalista, el general Yevgeny Primakov.
En noticias más recientes, también quisiera recordar a los cheerleaders pro-Putin, que Putin y el Kremlin fueron los que primero presionaron para que el FMI tomara el control de la economía de Ucrania y el FMI está exigiendo ahora que Ucrania luche contra Rusia a cambio de apoyo financiero. Esto puede parecer irónico y contradictorio, menos para aquellos que son conscientes de que el falso paradigma Este/Oeste, forma parte de un plan mayor para la consolidación del poder.
Claramente, Putin y Rusia son sólo dos piezas más sobre el tablero de ajedrez globalista, enfrentándose a otros títeres de Occidente en un gran teatro diseñado para distraer y dividir a las masas a través del caos.
Como Kissinger señala, una crisis es una oportunidad.
¿Cuál es el objetivo? Ellos lo han dicho, abiertamente, en numerosas ocasiones.
Los primeros grandes objetivos del Nuevo Orden Mundial son establecer una moneda global y el control económico centralizado. Las elites no están satisfechas con el dominio de las economías individuales. Buscan la homogeneización política total y el fin de toda soberanía nacional. Con una moneda global, el camino hacia un gobierno global estará despejado.
Los jefes de Estado de todo el mundo, incluyendo a Putin, así como los banqueros internacionales y representantes del FMI han pedido públicamente que el FMI se haga cargo del sistema económico global a través de su programa monetario de Derechos Especiales de Giro.
Sin embargo, para que los Derechos Especiales de Giro se conviertan en una moneda global, antes se deben resolver algunas cuestiones.
El dólar de EE.UU. debe caer
El dólar debe perder su estatus de moneda de reserva mundial y colapsar en valor relativo, antes de que el Derecho Especial de Giro pueda ser instaurado. Aquí es donde los expertos convencionales pierden la noción de la realidad. Para ellos, el dólar es invencible. No ven las muchas debilidades de la moneda americana, incluyendo la incapacidad de EEUU a la hora de afrontar los más 200 billones de dólares en deuda.
Otros creen que el dólar es la moneda del Nuevo Orden Mundial y que los globalistas estan centrados en Estados Unidos. La evidencias sugieren lo contrario. Los globalistas no tienen ninguna lealtad a ninguna nación o cultura. Su única lealtad es consigo mismos y con sus ambiciones de poder. Si para ello han de sacrificar el dólar o los EE.UU., no tendran ningun problema en hacerlo, como si amputaran un miembro gangrenado.
Se debe producir un reemplazo de liquidez
China, en mi opinión, ha sido siempre el mecanismo clave que usaran los elitistas para establecer una moneda verdaderamente global.
La mayoría de gente piensa que no puede producirse un colapso del dólar, por la simple razón de que no hay ninguna otra moneda con tan amplia liquidez que pueda ocupar el lugar del dólar.
Pero eso, en el último par de años, ha cambiado.
El gobierno Chino y sus bancos han emitido aproximadamente 25 billones de dólares en instrumentos de deuda y monetización. Todo el mundo lo considera una peligrosa “burbuja de deuda”. Pero yo diría que la monetización de China ha sido cuidadosamente diseñada con el fin de sentar las bases para un aumento masivo de liquidez en el Yuan.
El argumento de que esta increíble generación de deuda de China es un signo de inminente colapso puede ser un error. La deuda de EE.UU., incluidos los pasivos no financiados, empequeñece absolutamente los 25 billones de dolares de deuda China. La deuda de China apenas ha tenido tiempo de generar intereses, sin embargo, los EEUU se ven atrapados en una espiral interminable de pagos de interés que estan devorando la estructura fiscal del país hasta sus huesos.
Si hay una economia al borde del colapso, esa es la de los Estados Unidos, no la de China.
En realidad, los chinos no quieren que el yuan reemplace al dólar; en cambio, están preparando al yuan para introducirlo en la cesta de los Derechos Especiales de Giro del FMI. Y ahora que China se convertirá en la economía más grande del mundo, según el Banco Mundial, su inclusión está más que asegurada.
Pero, ¿cuando podría ocurrir esto?
Cada 5 años, el FMI realiza una conferencia internacional sobre los Derechos Especiales de Giro. Durante estas reuniones, el FMI decide si mete una nueva moneda en la cesta y si amplia la circulación de los Derechos Especiales de Giro.
Curiosamente, la próxima conferencia del FMI sobre los Derechos Especiales de Giro está programada para entre finales de 2014 y comienzos de 2015.
Otra extraña coincidencia: el Congreso de EE.UU. tenía que votar sobre la legislación para hacer nuevas asignaciones de capital al FMI, en abril. Pero el voto no se produjo. Las nuevas asignaciones se destinaron a financiar una expansión de los programas de ayuda del FMI, con la inclusión de los países BRIC en la toma de decisiones.
Si el gobierno de EE.UU. no aprueba esta legislación, Rusia y otras naciones han exigido que el FMI avance en estas reformas sin contar con los Estados Unidos.
En tal caso, los EE.UU. perdería su poder de veto sobre las decisiones del FMI. Yo creo que esto es algo deliberado, que los EE.UU. tienen la intención de perder su poder de veto y que la conferencia simultánea sobre los Derechos Especiales de Giro, anunciará la inclusión del yuan chino, preparando el escenario para la sustitución del dólar como reserva mundial.
El Derecho Especial de Giro no será implementado de manera inmediata como moneda común. Más bien, el FMI se hará cargo de la gestión de las monedas incluidas en la cesta y las valorará utilizando como referencia el Derecho Especial de Giro. Por ejemplo, un dolar americano, actualmente, sólo vale 0,64 Derechos Especiales de Giro (DEG).
En un futuro próximo, es de esperar que el dólar caiga en picado en relación con el valor del DEG. A su vez, otras monedas con posiciones económicas más fuertes aumentarán en valor relativo al DEG.
Creo que una de las determinaciones principales a la hora de valorar una moneda en comparación con el DEG serán las reservas de oro del país.
Esta es la razón por la que Rusia y China en particular, han estado comprando metales preciosos a un ritmo inaudito (y la razón por la que las reservas de oro de Estados Unidos nunca han sido objeto de auditoría).
El propio FMI es uno de los mayores tenedores mundiales de oro físico, con cerca de 3.000 toneladas métricas (oficialmente). Con la caída del sistema del dólar y los inversores clamando por una cobertura fiable para proteger cualquier ahorro que les quede, el oro posiblemente podría dispararse hasta los 5.000 o los 10.000 dólares por onza.
Los gobiernos que posean más oro se colocaran en una posición más favorable cuando se implemente el Derecho Especial de Giro como nuevo estándar de reserva.
Se debe crear un evento crítico
La centralización del poder siempre se logra mejor en momentos de calamidad desconcertante. La conjuración de las crisis es uno de los métodos más antiguos de la dominación elitista. No sólo pueden confundir y asustar a las masas con ello, sino también salir al rescate y presentarse ante la opinión pública como héroes y salvadores. La dialéctica hegeliana es el pilar de los tiranos.
La destrucción del dólar y la institución de una burocracia económica mundial no son acciones que los financieros internacionales puedan ejecutar públicamente. Estos eventos coincidirán con una catástrofe extrema , probablemente peor que la Gran Depresión , con millones y millones de personas y familias que pierdan su capacidad financiera. Se producirán oleadas de crimen, muerte y protestas. La gente buscará a alguien a quien culpar. Aquí es donde el falso paradigma del enfrentamiento Este/Oeste entra en juego.
En general, se espera que a medida que se establezcan las sanciones entre Rusia y los EE.UU., el dólar terminará en la guillotina. China ya ha dado su apoyo a Rusia en oposición a la interferencia de la OTAN en Ucrania.
El escenario está listo. He advertido desde hace bastante tiempo que el desarrollo de las tensiones Este/Oeste serían utilizadas como una excusa para encubrir el colapso del sistema del dólar.
He advertido que entre los medios estadounidenses este colapso podría ser atribuido al abandono del dolar como moneda de reserva por parte de los opositores a EEUU.
A su vez, la comunidad internacional vería esto como un ejemplo de la locura y la torpeza de EEUU y no como el resultado de un programa encubierto de desestabilización económica a escala mundial. Esto podría llevar al mundo a una guerra o a una tormenta económica que dejara a gran parte del planeta paralizado y desesperado por encontrar ayuda.
En cualquier caso, el plan elitista es usar chivos expiatorios y falsos enemigos para llamar nuestra atención lejos de los verdaderos culpables: los propios bancos internacionales.
No se equivoquen: esta lucha no se centra en Barack Obama o en Putin.
Estos hombres son herramientas, recaderos, mascotas públicas. No se dejen engañar. Pase lo que pase en Ucrania y pase lo que pase entre Rusia, China y Occidente, sólo hay dos lados reales en esta batalla: el establishment elitista y aquellos que son lo suficientemente inteligentes como para reconocer sus maniobras y oponerse a ellos.
