Quien no los a visto alguna vez en su vida?
¿Como se llama?
Las miodesopsias también llamadas moscas volantes (del latín, 'muscae volitantes') o cuerpos flotantes, son un defecto ocular que se manifiesta en la visión como un conjunto de manchas, puntos o filamentos (a menudo en forma de telaraña) suspendidos en el campo visual.[sup]1[/sup][/color]
Se trata de opacidades que se forman en el humor vítreo, el cuerpo gelatinoso que rellena el globo del ojo, y que con el paso de la luz proyectan su sombra sobre la retina. En la mayor parte de los casos, son una consecuencia natural del envejecimiento de este cuerpo vítreo, que va perdiendo agua y disminuyendo de volumen. En consecuencia, las proteínas vítreas que han perdido agua se condensan perdiendo transparencia. Aunque estas manchas parecen estar frente al ojo, en realidad flotan en el interior de este.
Causas:
Se han identificado como principales factores predisponentes la edad (aunque esto no quiere decir que no lo padezca gente joven, incluso niños) y la miopía. Se observa un aumento en la incidencia de las miodesopsias con la edad. En el segundo caso, se argumenta que los miopes, por disponer de un ojo más alargado, tienden a acelerar el proceso de desprendimiento vítreo.
En cualquier caso, no se ha conseguido identificar con precisión la relación causa-efecto, dado que los factores indicados no explican de por sí la aparición y la progresión de las moscas volantes. También se apuntan la diabetes y las operaciones de cataratas como causa de su aparición. En una proporción mucho menor, las miodesopsias pueden ser consecuencia de una enfermedad ocular grave, como la uveítis, hemorragia vítrea odesprendimiento de retina. A veces pueden estar ocasionadas por incidencia de luz directa de tipo LÁSER sobre el ojo, provocando la condensación del humor vítreo dentro del ojo.
En la mayoría de los casos, las miodesopsias se consideran una circunstancia normal e inocua, que no compromete la visión. El paciente se puede sentir frustrado porque sabe que no existe una solución efectiva y segura al problema y, piensa que tiene que vivir el resto de su vida con ellas, parece que las moscas volantes son un pequeño defecto en el humor vítreo pero son mucho más que eso, ya que se amplifican muchas veces en tamaño al verse proyectadas sobre lo que estamos mirando y suelen distraer mucho, si las moscas volantes son muy densas pueden provocar una visión borrosa cuando pasan por delante. En una proporción más reducida, las moscas volantes pueden estar relacionadas con procesos que comprometen la integridad de la retina. Por ello, cuando aparecen de forma muy repentina o asociadas a fotopsias (destellos de luz), debe acudirse a un médico. En este caso, el procedimiento de diagnóstico suele conllevar un examen del fondo de ojo, por medio del cual se examina el estado de la retina para descartar la existencia de una enfermedad o lesión grave. En estos casos, las miodesopsias tienen la consideración de síntoma.
No existe un tratamiento efectivo y seguro contra las miodesopsias. Cuandos las opacidades son pocas y, tras unos meses, los pacientes se adaptan a ellas, amortizándolas en su campo de visión. No obstante, las moscas raramente desaparecen físicamente y se mantienen visibles, en particular al mirar superficies homogéneas, como el cielo despejado.
No se ha demostrado relación entre las opacidades vítreas y el uso de complejos vitamínicos basados en vitamina A, luteína y otros componentes. No existen datos objetivos ni referencias médicas de pacientes que hayan mejorado sus opacidades como consecuencia del consumo de estos preparados.
Cabe referir dos recursos de gran excepcionalidad en el tratamiento de miodesopsias. Por una parte está la vitrectomía, que es propia de otras problemáticas oculares pero que va teniendo más aceptación en el mundo para ser utilizada en la miodesopsia. Esta cirugía consiste en la extracción del humor vítreo y su sustitución por una solución salina. Por la otra, está el uso de la fotodisrrupción por medio del láser. Este método trata las opacidades con descargas láser. En unos casos se busca disgregarlas para hacerlas menos visibles y, en otros desprender sus anclajes, para que se desplacen a la periférica del campo visual. Se ha argumentado que es un método no exento de riesgos sobre la retina y de cuestionable eficacia sobre el problema en sí.
Las recomendaciones generalmente aceptadas, se basan en aprender a convivir con las miodesopsias utilizando los siguientes procedimentos:
[ul][li]No «perseguir» las «manchas» con la mirada ni tratar de enfocarlas; no hacerles caso como si fuesen moscas reales.[/li][li]Cuando se trabaja con computadoras y aparecen en el monitor, no perseguirlas. Aunque resulte difícil, continuar con lo que se estaba haciendo.[/li][/ul] Se recomienda consultar a un oftalmólogo si repentinamente:
[ul][li]Aparecen muchos cuerpos flotantes.[/li][li]Se perciben centelleos de luz (cuando el humor vítreo roza la retina o tira de ella, causa la sensación de centelleos de luz).[/li][li]Se sufre la pérdida de la visión lateral (esto es más frecuente en personas de más de 45 años).[/li][/ul]
Se trata de opacidades que se forman en el humor vítreo, el cuerpo gelatinoso que rellena el globo del ojo, y que con el paso de la luz proyectan su sombra sobre la retina. En la mayor parte de los casos, son una consecuencia natural del envejecimiento de este cuerpo vítreo, que va perdiendo agua y disminuyendo de volumen. En consecuencia, las proteínas vítreas que han perdido agua se condensan perdiendo transparencia. Aunque estas manchas parecen estar frente al ojo, en realidad flotan en el interior de este.
Causas:
Se han identificado como principales factores predisponentes la edad (aunque esto no quiere decir que no lo padezca gente joven, incluso niños) y la miopía. Se observa un aumento en la incidencia de las miodesopsias con la edad. En el segundo caso, se argumenta que los miopes, por disponer de un ojo más alargado, tienden a acelerar el proceso de desprendimiento vítreo.
En cualquier caso, no se ha conseguido identificar con precisión la relación causa-efecto, dado que los factores indicados no explican de por sí la aparición y la progresión de las moscas volantes. También se apuntan la diabetes y las operaciones de cataratas como causa de su aparición. En una proporción mucho menor, las miodesopsias pueden ser consecuencia de una enfermedad ocular grave, como la uveítis, hemorragia vítrea odesprendimiento de retina. A veces pueden estar ocasionadas por incidencia de luz directa de tipo LÁSER sobre el ojo, provocando la condensación del humor vítreo dentro del ojo.
Problematica:
En la mayoría de los casos, las miodesopsias se consideran una circunstancia normal e inocua, que no compromete la visión. El paciente se puede sentir frustrado porque sabe que no existe una solución efectiva y segura al problema y, piensa que tiene que vivir el resto de su vida con ellas, parece que las moscas volantes son un pequeño defecto en el humor vítreo pero son mucho más que eso, ya que se amplifican muchas veces en tamaño al verse proyectadas sobre lo que estamos mirando y suelen distraer mucho, si las moscas volantes son muy densas pueden provocar una visión borrosa cuando pasan por delante. En una proporción más reducida, las moscas volantes pueden estar relacionadas con procesos que comprometen la integridad de la retina. Por ello, cuando aparecen de forma muy repentina o asociadas a fotopsias (destellos de luz), debe acudirse a un médico. En este caso, el procedimiento de diagnóstico suele conllevar un examen del fondo de ojo, por medio del cual se examina el estado de la retina para descartar la existencia de una enfermedad o lesión grave. En estos casos, las miodesopsias tienen la consideración de síntoma.
Tratamiento:
No existe un tratamiento efectivo y seguro contra las miodesopsias. Cuandos las opacidades son pocas y, tras unos meses, los pacientes se adaptan a ellas, amortizándolas en su campo de visión. No obstante, las moscas raramente desaparecen físicamente y se mantienen visibles, en particular al mirar superficies homogéneas, como el cielo despejado.
No se ha demostrado relación entre las opacidades vítreas y el uso de complejos vitamínicos basados en vitamina A, luteína y otros componentes. No existen datos objetivos ni referencias médicas de pacientes que hayan mejorado sus opacidades como consecuencia del consumo de estos preparados.
Cabe referir dos recursos de gran excepcionalidad en el tratamiento de miodesopsias. Por una parte está la vitrectomía, que es propia de otras problemáticas oculares pero que va teniendo más aceptación en el mundo para ser utilizada en la miodesopsia. Esta cirugía consiste en la extracción del humor vítreo y su sustitución por una solución salina. Por la otra, está el uso de la fotodisrrupción por medio del láser. Este método trata las opacidades con descargas láser. En unos casos se busca disgregarlas para hacerlas menos visibles y, en otros desprender sus anclajes, para que se desplacen a la periférica del campo visual. Se ha argumentado que es un método no exento de riesgos sobre la retina y de cuestionable eficacia sobre el problema en sí.
Las recomendaciones generalmente aceptadas, se basan en aprender a convivir con las miodesopsias utilizando los siguientes procedimentos:
[ul][li]No «perseguir» las «manchas» con la mirada ni tratar de enfocarlas; no hacerles caso como si fuesen moscas reales.[/li][li]Cuando se trabaja con computadoras y aparecen en el monitor, no perseguirlas. Aunque resulte difícil, continuar con lo que se estaba haciendo.[/li][/ul] Se recomienda consultar a un oftalmólogo si repentinamente:
[ul][li]Aparecen muchos cuerpos flotantes.[/li][li]Se perciben centelleos de luz (cuando el humor vítreo roza la retina o tira de ella, causa la sensación de centelleos de luz).[/li][li]Se sufre la pérdida de la visión lateral (esto es más frecuente en personas de más de 45 años).[/li][/ul]